. está más que claro que alguna vez se va a filmar la historia del robo al banco de acasusso. ayer, cenando con mi viejo, me sugirió el mejor final. a ver:
. ya se planeó, ya se sobornó, ya se robó, ya se escaparon. todo eso durante la primer hora y media de la película. ahora, sobre el final, vemos entre las caras de quienes reclaman por el contenido de sus cajas de seguridad la cara del jefe del equipo de ladrones -leo sbaraglia, digamos, o rodrigo de la serna. los diarios anuncian: se devolverán hasta u$s 50 mil a quienes tuvieran sus bienes en las cajas violentadas. va a haber quejas, sí, y con seguridad, para evitar el escándalo, el banco duplicará o triplicará esa cifra. última secuencia: el jefe de los ladrones -rodrigo de la serna o leo sbaraglia, digamos-, con lentes negras y sonrisa de navidad, saliendo del banco con un maletín. los últimos 50 o 100 o 150 mil de un botín millonario. el malo simpático volvió a ganarle al malo antipático -como en toda película de ladrones- y, como en toda película de ladrones, el malo simpático, además, humilla al malo antipático. le gana de local y con un gol -el último gol de una goleada de proporciones rugbísticas- de rabona.